Pink Floyd

PINK FLOYD forma parte de la cultura musical de nuestros tiempos. Desde el momento en que surgieron como banda, construyeron un puente para el que escucha pudiera transportarse a lugares oscuros y espaciales, impregnados de tristeza y melancolía, encendiendo la imaginación en muchas formas. Su magia, llena de la profunda intensidad de su mensaje, nos atrapó para hacernos sentir diferentes emociones.

Esta expresión artística, impregnada de estéticas intensas, nos lleva a diversos éxtasis, que nos desdoblan para gozar de los sonidos oníricos y estéreos que tanto necesitamos para movernos a otros planos de nuestra existencia.

Sus agudos mensajes y seductoras sonoridades, a la par, sirven también para despertar nuestra sensibilidad, a veces corrupta, a veces repetitiva, por el aburrimiento de la vida cotidiana.

El magnetismo es tan fuerte que millones de fans no pueden estar equivocados, pues los siguen y los disfrutan, cada vez que se presenta la oportunidad. Son diversas generaciones las que están detrás de ellos, por eso su música se ha vuelto atemporal. No importa qué se encuentra en voga, la banda británica se impone a cualquier fenómeno musical del momento. Son colosales.

Roxk sicodélico, rock espacial, rock progresivo, rock vanguardista, como quieran llamarle, ha originado que Syd Barrett, Roger Waters, David Gilmour, Rick Wright y Nick Mason pasen a las páginas de la historia del rock, sin dificultad, pues se merecen el reconocimiento a su talento y creatividad que ha marcado a muchos de nosotros.

Todos hablamos el mismo lenguaje...